MANUEL REY CABELLO, nacido en Puente Genil (Córdoba) en el año 1.879, fue poeta, escritor y periodista, destacando la publicación de su libro CHILINDRINA, obra de una poesía festiva.
© Enrique Alcalá Ortiz
Como en los poetas de su generación, Manuel Rey Cabello también pertenece al Casino de Priego, por estos años sociedad que acaparaba el interés de las clases cultas y en buena posesión económica. La primera referencia nos aparece en 1910 cuando se da de alta con el carácter de transeúnte. Procedente de Puente Genil (Córdoba) recaló en Priego para ejercer su profesión que hasta ahora no hemos averiguado. Por el año 1915, es seguro que ya había fijado de cualquier forma su residencia en Priego, si bien mantenía frecuentes y continuados contactos con su tierra natal. Como los poetas anteriores que hemos comentado, participa en las veladas literarias que se organizan en el año 1915. En el exordio introductorio que hace antes de recitar su poesía Quisiera, dedica algunas frases a los actuantes anteriores: “hemos ya admirado la sublime palabra de ese insigne maestro de la oratoria que se llama don Niceto Alcalá-Zamora”; “el magnífico discurso escrito y leído por don Carlos Valverde y admirado después la magnífica poesía que nos leyó últimamente”; “donde escuchamos la historia antigua de Priego, admirables apuntes históricos recopilados por don Francisco Ruiz Santaella”; “el trabajo dedicado al Jurado, notable obra del jurisconsulto don Antonio de Castilla; “la delicada e instructiva conferencia de don José Valverde, sobre “La apicultura movilista”; “los sublimes versos de don Miguel Carrillo y los jocosos de don Baldomero”.
Como consecuencia de estas veladas, se empezó a publicar el decenario Patria Chica, creado por Carlos Valverde López y dirigido por Manuel Rey Cabello, con carácter decenal apareciendo los días 10, 20 y 30 de cada mes. Con lógica sus colaboraciones y noticias sobre su persona en este medio serán abundantes.
Nos enteramos de la suscripción que hace Patria Chica para socorrer a una señora a quien habían asesinado a sus hijos, en un ataque de celos de un loco, quedándose totalmente desvalida y en la pobreza. Colabora con 5 pesetas. Su amigo R. Pérez Ginés le dedica una poesía. Forma parte, en su calidad de Director del periódico local, de la Junta Local para conmemorar el Centenario de Cervantes. Esta Junta estaba presidida por el alcalde, Juan Bufill Torres, y además pertenecían a ella José Baldo, secretario, y Evaristo Meléndez Alarcón, como primera autoridad eclesiástica. Como personas de la cultura, fueron elegidos, Francisco Candil, Víctor Rubio Chávarri y José Pedrajas Suardíaz, acordando celebrar una reunión al mes. En abril llega su madre, Trinidad Cabello, a pasar una temporada en su casa. En este mismo mes le hace una interesante entrevista a la canzonetista prieguense Paquita Sicilia quien cuenta su formación y el desarrollo de su carrera de artista, algunas incidencias de sus actuaciones y las características de su repertorio. Escribe una sentida crónica en recuerdo de su amigo Manuel Núñez fallecido a la edad de 31 años.
Forma parte junto a Carlos Valverde, Francisco Ruiz Santaella, Francisco Candil, Manuel Núñez y José Bergillos del jurado calificador del concurso convocado por Patria Chica de prosa y verso, que precisamente dejan desierto por no considerar con suficiente calidad los trabajos presentados. Después de unos cuatro meses al frente de la publicación, abrumado por los problemas que diariamente le daban los lectores y la corriente de crítica que había aparecido en algunos colaboradores, abandona la dirección alegando “multiplicidad de los trabajos que sobre mí pesan”.
Siendo ya ex director, en notas de sociedad nos enteramos de la mejoría en su enfermedad que había experimentado su hija, y la visita que le hace el médico de Puente Genil, Pascual Crespo.
A principios de enero del año 1916, escribía Ricardo de Montis en el Diario de Córdoba: “ BALANCE LITERARIO.- El 10 de febrero empezó a publicarse en Priego un periódico decenal independiente, titulado Patria Chica, fundado por don Carlos Valverde López, dirigido por don Manuel Rey Cabello e impreso en la tipografía de dicho pueblo La Aurora. Desapareció en septiembre”.
http://www.enriquealcalaortiz.com/
OH, EL HONOR
Hablando del honor dos caballeros
“ a las manos “ llegaron prontamente,
Y, como caso raro, ( no es frecuente)
Los polis detuvieron los aceros.
Separados que fueron, altaneros
Cambiaron sus tarjetas, ciegamente,
Y cada cual marchóse diligente
El duelo a prevenir , siendo severos.
Concertado que fue , por los doctores,
El duelo se convino hasta morir
Alguno de los esgrimidores…
Llegó la hora fatal .. .la de partir…
Y no se nada más de esos señores
Porque no tuve tiempo para ir.
COPLAS INOCENTES
Para D. Anselmo Ruiz Martínez
Como no sé que escribir,
estos cantares haré;
paciencia se necesita
si los llegas a leer.
El sereno de mi barrio
cuando grita es kolosal...,
por eso dicen que es buena
el agua del Fontanar.
Hay aquí plaza de toros
y nunca fiesta tenemos...,
es que en llegando el verano
echan morcilla a los perros.
La fiesta del centenario
bien vamos a celebrar...,
Cleto, prepara la caña
y vámonos a pescar.
Una compañía de luz
que cobra caro y que falta,…
¿No habrá por ahí un guasón
que venga a meter la pata?
Con tanta lluvia, este año
dicen que malo será...,
voy a sacar al momento
la célula personal.
Ayer me dijo un amigo
que el tranvía se iba a poner...
como estoy acatarrado
me dio ganas de toser.
Un automóvil lujoso
pasó las calles volando...
Lo mismo aquí que en Jerrera
hay chicos que están sobrando.
Ayer Maura, en el Real
ha dado una conferencia...,
y mañana un liberal
dará otra allí.., o en Valencia.
De conferencias, también,
andan Melquíades y Dato,
y ninguno de ellos sabe
donde aquí aprieta el zapato.
Hablando ayer de teatros
nombramos a Benavente,
y dijimos que en sus obras,
el hombre domina siempre.
A un recluta aristocrático
han sumariado en Madrid….
¡si vieran cuánto me gusta
ver los títulos así!
La guerra sigue lo mismo
que estaba en el mes de agosto;
¡han pasado nueve meses
y esperamos el aborto!
Niña, si tienes al novio
peleando en las trincheras,
dile que se venga aquí
para matar chismorreras.
El reparto de consumos...,
la matrícula industrial...,
voy a comprar un retaco
porque me gusta cazar.
De escribir no tengo ganas
y aquí termino estas coplas
sin intenciones malsanas[1].
A DON CARLOS VALVERDE
(Málaga)
Admirable autor poético
fundador de este periódico,
ahí le envío estos esdrújulos
que no tienen más propósito
que el de llevarle a ese Málaga
noticias, y ser lacónico,
pues no quiero ser muy gráfico
por no serle latónico.
Como hablarle de Pitágoras
de Platón o de Teófilo
de Hipócrates o de Séneca
no me parece muy lógico,
teniendo asuntos gravísimos
que se van haciendo crónicos,
le haré una reseña rápida
del conflicto gastronómico.
Es un verdadero escándalo
y lo que ocurre es diabólico;
el pan está aquí carísimo…,
ya no hay problema económico…
no puedo comprar…, ni espárragos…,
todo aquí está…, melancólico,
y como siga, el gastrónomo
no padecerá de cólico.
El aceite está en la atmósfera
o en las nubes, o en depósito;
hemos perdido el estómago
y es reservado el pronóstico.
En fin, todos los artículos
que pueden servir de tónico
tienen precio elevadísimo
y nuestro fin está próximo.
Mándenos acá una fórmula,
que usted siempre ha sido pródigo
y véngase, en un tren rápido,
para hacernos el diagnóstico[2].
AL PÚBLICO
Sin títulos a la vista
para ser mal redactor,
me hacen en esta Revista
de un plumazo, Director.
No sé como he de cumplir
en cargo tan delicado,
ni como voy a escribir
para no serles pesado;
pues ni mi musa es jocosa,
ni mi prosa vale nada,
ni hice en mi vida una cosa
que merezca ser nombrada.
Me gustaría escribirles
mil artículos en broma;
después en serio decirles
algo de Nerón y… Roma.
Hablarles de agricultura,
de artes, de música y poesía,
y de Historia y de cultura
de guerra y filosofía.
De todo, un buen Director
dirás tú, debe saber,
pero este tu servidor
lo va tener que aprender.
Pues si de contarte historias
que te puedan divertir,
también citaré… memorias
que, vamos, te han de aburrir.
Yo siempre procuraré
serte fiel en mis escritos
y si te hablo de pájaros… fritos,
aunque no tengas paciencia
para poderme aguantar,
te pido benevolencia
y espero me la has de dar.
También este Director
para terminar, indica,
que améis siempre con fervor
ésta, nuestra Patria Chica[3].
[1] PATRIA CHICA, 2-5-1915. Número 10. Página 1.
[2] Patria Chica, 20 de marzo de 1915, número 5, página 1.
[3] Patria Chica, número 1, 10 de febrero de 1915, página 2.
Como consecuencia de estas veladas, se empezó a publicar el decenario Patria Chica, creado por Carlos Valverde López y dirigido por Manuel Rey Cabello, con carácter decenal apareciendo los días 10, 20 y 30 de cada mes. Con lógica sus colaboraciones y noticias sobre su persona en este medio serán abundantes.
Nos enteramos de la suscripción que hace Patria Chica para socorrer a una señora a quien habían asesinado a sus hijos, en un ataque de celos de un loco, quedándose totalmente desvalida y en la pobreza. Colabora con 5 pesetas. Su amigo R. Pérez Ginés le dedica una poesía. Forma parte, en su calidad de Director del periódico local, de la Junta Local para conmemorar el Centenario de Cervantes. Esta Junta estaba presidida por el alcalde, Juan Bufill Torres, y además pertenecían a ella José Baldo, secretario, y Evaristo Meléndez Alarcón, como primera autoridad eclesiástica. Como personas de la cultura, fueron elegidos, Francisco Candil, Víctor Rubio Chávarri y José Pedrajas Suardíaz, acordando celebrar una reunión al mes. En abril llega su madre, Trinidad Cabello, a pasar una temporada en su casa. En este mismo mes le hace una interesante entrevista a la canzonetista prieguense Paquita Sicilia quien cuenta su formación y el desarrollo de su carrera de artista, algunas incidencias de sus actuaciones y las características de su repertorio. Escribe una sentida crónica en recuerdo de su amigo Manuel Núñez fallecido a la edad de 31 años.
Forma parte junto a Carlos Valverde, Francisco Ruiz Santaella, Francisco Candil, Manuel Núñez y José Bergillos del jurado calificador del concurso convocado por Patria Chica de prosa y verso, que precisamente dejan desierto por no considerar con suficiente calidad los trabajos presentados. Después de unos cuatro meses al frente de la publicación, abrumado por los problemas que diariamente le daban los lectores y la corriente de crítica que había aparecido en algunos colaboradores, abandona la dirección alegando “multiplicidad de los trabajos que sobre mí pesan”.
Siendo ya ex director, en notas de sociedad nos enteramos de la mejoría en su enfermedad que había experimentado su hija, y la visita que le hace el médico de Puente Genil, Pascual Crespo.
A principios de enero del año 1916, escribía Ricardo de Montis en el Diario de Córdoba: “ BALANCE LITERARIO.- El 10 de febrero empezó a publicarse en Priego un periódico decenal independiente, titulado Patria Chica, fundado por don Carlos Valverde López, dirigido por don Manuel Rey Cabello e impreso en la tipografía de dicho pueblo La Aurora. Desapareció en septiembre”.
http://www.enriquealcalaortiz.com/
OH, EL HONOR
Hablando del honor dos caballeros
“ a las manos “ llegaron prontamente,
Y, como caso raro, ( no es frecuente)
Los polis detuvieron los aceros.
Separados que fueron, altaneros
Cambiaron sus tarjetas, ciegamente,
Y cada cual marchóse diligente
El duelo a prevenir , siendo severos.
Concertado que fue , por los doctores,
El duelo se convino hasta morir
Alguno de los esgrimidores…
Llegó la hora fatal .. .la de partir…
Y no se nada más de esos señores
Porque no tuve tiempo para ir.
COPLAS INOCENTES
Para D. Anselmo Ruiz Martínez
Como no sé que escribir,
estos cantares haré;
paciencia se necesita
si los llegas a leer.
El sereno de mi barrio
cuando grita es kolosal...,
por eso dicen que es buena
el agua del Fontanar.
Hay aquí plaza de toros
y nunca fiesta tenemos...,
es que en llegando el verano
echan morcilla a los perros.
La fiesta del centenario
bien vamos a celebrar...,
Cleto, prepara la caña
y vámonos a pescar.
Una compañía de luz
que cobra caro y que falta,…
¿No habrá por ahí un guasón
que venga a meter la pata?
Con tanta lluvia, este año
dicen que malo será...,
voy a sacar al momento
la célula personal.
Ayer me dijo un amigo
que el tranvía se iba a poner...
como estoy acatarrado
me dio ganas de toser.
Un automóvil lujoso
pasó las calles volando...
Lo mismo aquí que en Jerrera
hay chicos que están sobrando.
Ayer Maura, en el Real
ha dado una conferencia...,
y mañana un liberal
dará otra allí.., o en Valencia.
De conferencias, también,
andan Melquíades y Dato,
y ninguno de ellos sabe
donde aquí aprieta el zapato.
Hablando ayer de teatros
nombramos a Benavente,
y dijimos que en sus obras,
el hombre domina siempre.
A un recluta aristocrático
han sumariado en Madrid….
¡si vieran cuánto me gusta
ver los títulos así!
La guerra sigue lo mismo
que estaba en el mes de agosto;
¡han pasado nueve meses
y esperamos el aborto!
Niña, si tienes al novio
peleando en las trincheras,
dile que se venga aquí
para matar chismorreras.
El reparto de consumos...,
la matrícula industrial...,
voy a comprar un retaco
porque me gusta cazar.
De escribir no tengo ganas
y aquí termino estas coplas
sin intenciones malsanas[1].
A DON CARLOS VALVERDE
(Málaga)
Admirable autor poético
fundador de este periódico,
ahí le envío estos esdrújulos
que no tienen más propósito
que el de llevarle a ese Málaga
noticias, y ser lacónico,
pues no quiero ser muy gráfico
por no serle latónico.
Como hablarle de Pitágoras
de Platón o de Teófilo
de Hipócrates o de Séneca
no me parece muy lógico,
teniendo asuntos gravísimos
que se van haciendo crónicos,
le haré una reseña rápida
del conflicto gastronómico.
Es un verdadero escándalo
y lo que ocurre es diabólico;
el pan está aquí carísimo…,
ya no hay problema económico…
no puedo comprar…, ni espárragos…,
todo aquí está…, melancólico,
y como siga, el gastrónomo
no padecerá de cólico.
El aceite está en la atmósfera
o en las nubes, o en depósito;
hemos perdido el estómago
y es reservado el pronóstico.
En fin, todos los artículos
que pueden servir de tónico
tienen precio elevadísimo
y nuestro fin está próximo.
Mándenos acá una fórmula,
que usted siempre ha sido pródigo
y véngase, en un tren rápido,
para hacernos el diagnóstico[2].
AL PÚBLICO
Sin títulos a la vista
para ser mal redactor,
me hacen en esta Revista
de un plumazo, Director.
No sé como he de cumplir
en cargo tan delicado,
ni como voy a escribir
para no serles pesado;
pues ni mi musa es jocosa,
ni mi prosa vale nada,
ni hice en mi vida una cosa
que merezca ser nombrada.
Me gustaría escribirles
mil artículos en broma;
después en serio decirles
algo de Nerón y… Roma.
Hablarles de agricultura,
de artes, de música y poesía,
y de Historia y de cultura
de guerra y filosofía.
De todo, un buen Director
dirás tú, debe saber,
pero este tu servidor
lo va tener que aprender.
Pues si de contarte historias
que te puedan divertir,
también citaré… memorias
que, vamos, te han de aburrir.
Yo siempre procuraré
serte fiel en mis escritos
y si te hablo de pájaros… fritos,
aunque no tengas paciencia
para poderme aguantar,
te pido benevolencia
y espero me la has de dar.
También este Director
para terminar, indica,
que améis siempre con fervor
ésta, nuestra Patria Chica[3].
[1] PATRIA CHICA, 2-5-1915. Número 10. Página 1.
[2] Patria Chica, 20 de marzo de 1915, número 5, página 1.
[3] Patria Chica, número 1, 10 de febrero de 1915, página 2.
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