Los poetas Fernando Sabido Sánchez, Mariano Rivera Cross, Carlos Guerrero, Domingo Faílde y Dolors Alberola en Jerez de La Frontera (Cádiz), Primavera 2013

lunes, 9 de abril de 2012

1190.- FRANCISCO IRIBARNE IRIBARNE

Escultura de la tumba de Blanca de Navarra.




Francisco Iribarne Iribarne nació en Almería el 24 de junio de 1856, cursó en Granada los estudios de Leyes, y, habiendo regresado a su ciudad natal, ejerció en ella su profesión de abogado, consagrando a su carrera, a la política y a las letras sus actividades.

Fué Juez municipal e interino de primera instancia. Miembro de la Junta de Defensa de 1873, Diputado provincial, Alcalde de la ciudad en 1877 y 1879, y Fiscal de las Audiencias de Huércal-Overa, Cartagena y Palma de Mallorca.

Como escritor, empezó cultivando la poesía Lírica; dióse luego a conocer como dramaturgo entregando a la escena las notables obras en verso Doña Blanca de Navarra, drama histórico estrenado el 9 de diciembre de 1865, y El cuarto mandamiento, comedia representada por el célebre actor Rafael Calvo el 4 de junio de 1869; y poco después, en 1870, fundó y dirigió en Almeria el periódico La Lealtad, órgano del partido moderado, desde donde combatió vehementemente a la revolución. Falleció el 26 de febrero de 1903.




Lamentación de Doña Blanca


¡Ay, triste la que nace bajo dorados techos
y entre las regias galas del pabellón real!
¡Ay, triste la que nace mirando una corona
que acaso en algún dia su frente ceñirá!


¿Qué dichas guarda el mundo, qué dulces ilusiones
a la que en los palacios su vida ha de arrastrar?
¿En dónde están sus goces, en dónde sus amores,
en dónde las delicias de grata libertad?


Desde que nace al mundo, desde que en regia cuna
se arrulla por las auras de adulación falaz.
hasta los negros bordes del término certero,
donde la vida acaba y empieza la verdad.


En brazos entregada de pérfidos partidos
que ciegos se disputan el despojo real,
cual dos hambrientos buitres que en la región del viento
luchan enfurecidos la alondra al destrozar.


¡Ay, triste la que llora en soledad amarga.
mirando de los tiempos el perezoso andar,
sin sacudir un punto de su dolor la carga,
que el alma le devora con incesante afán!


(De Doña Blanca de Navarra,
acto I, escena 2.)

2 comentarios:

  1. Eusebio Navarro Martín4 de mayo de 2012, 13:18

    Sabe Vd si hay alguna foto por ahí de Francisco Iribarne Iribarne.
    Me gusto lo escrito

    ResponderEliminar
  2. Eusebio, es todo lo que encontré de Francisco Iribarne, pero nunca cierro las entradas, seguiré buscando como con los demás, un abrazo
    Fernando

    ResponderEliminar